Desde el servicio de Nutrición de Clínica Varos, hoy te queremos proponer algunos «tips» esenciales acerca de hábitos alimentarios para que tu vida sea más saludable y así mantener tu sistema inmune sano y fuerte:

  • Limitar el consumo de ultraprocesados con alta densidad calórica y poca variedad de nutrientes. Elige alimentos de calidad (días atrás te planteamos algunas recomendaciones en el post “Lista de la compra”).
  • Hacer una rutina de ejercicios en casa diaria que nos ayude a mantenernos activos y así evitar el sedentarismo.
  • Evitar en la medida de lo posible los hábitos tóxicos. El alcohol o el tabaco pueden estar saboteando nuestras defensas.
  • Respetar nuestro descanso. En estos días puede existir un exceso de información y de uso de tecnologías que podrían alterar nuestros hábitos de sueño (te recomendamos, por ejemplo, dejar a un lado el móvil antes de acostarte).
  • Intentar manejar el estrés. A la vez que cuidamos nuestro estado físico, es de vital importancia mimar nuestra salud mental.

Además de estos consejos más generales, existe una serie de nutrientes específicos que nos ayudan a mantener una flora intestinal óptima y que nos permiten cuidar de ella para cuidar nuestro sistema inmunitario.

A través de nuestra alimentación, podemos modular la flora intestinal para mejorar nuestro sistema inmune ante síntomas de infecciones, ya sean por COVID-19 o por otro tipo de virus tanto respiratorios como digestivos.

ALIMENTOS QUE AYUDAN NUESTRO SISTEMA INMUNE

¿Has oído hablar alguna vez de la microbiota? La microbiota intestinal son unos microorganismos que se hospedan en nuestro intestino y regulan nuestro sistema inmune a la vez que actúan de barrera e impiden pasar virus y bacterias que intentan atacar a nuestro organismo.

La nutrición juega un papel fundamental en la modulación de la microbiota, por ello la alimentación debe de ser variada, equilibrada y rica en:

  • Vitaminas A, B, C, E presentes principalmente en frutas y verduras frescas.
  • Vitamina D: Te recomendamos potenciar su consumo, ya que normalmente existe un déficit acusado de esta vitamina en la población española. La vitamina D la encontramos en lácteos, huevos, sardinas, champiñones, aceite de oliva…
  • Omega-3: Presente en el pescado azul (salmón, atún, sardinas…), aceite de oliva, aguacate o verduras de hoja verde.
  • Y por último, alimentos ricos en probióticos fermentados como yogur (natural) o quesos.

La Guía de tratamientos de pacientes graves por COVID-19 de la Comisión Nacional de Salud China ya recomienda utilizar probióticos para el equilibrio de la microbiota intestinal y prevenir complicaciones propias de esta enfermedad.

Por todo ello, en Clínica Varos te recomendamos seguir una dieta equilibrada y reforzar la ingesta de esos nutrientes, que mejoran nuestra salud intestinal.

Berta Pinto Robayna (Nutricionista Clínica Varos)

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